A eso de la 10 de la mañana me tome el 78 y fui a los cementerios de Chacarita (para variar ja).
Me diriji primero al cementerio Alemán para dajarle unas flores a Hans Langsdorff. Luego fui a la Chacarita en si (yo le llamo el sudaca), tambien a llevar flores.. pero a un desconocido.
Tengo la costumbre de llevarle flores a muertos desconocidos( salvo este caso, o de familiares). Casi siempre me siento como un anciana cua ociosidad excede a la de quien les habla, pero me gusta hacerlo. Ver fechas, calcular edades, imaginarme cosas (aunque no sean reales) acerca del difunto.
Sin embargo hay algo por lo cual lo hago. Es el olor. Mi olfato no esta bien desarrollado, pero el olor mortuorio es uno de los pocos olores que percibo. Se distinguir el olor de nicho, del de un féretro durante un velatorio, como también el de la humedad y el que desprenden los hornos del crematorio. Aun no he tenido la experiencia de presenciar una exhumación, de seguro que me resulte muy placentera. Lamentablemente me siento atraída por esos olores desde muy chica. No es el cuerpo en si, es el olor. Maldigo tener solo olfato para eso, y peor aun, de disfrutarlo.
Es recurrente la fantasía de dormir en algún nicho recién abierto. Solo para impregnarme de los olores y luego disfrutar de la mórbida actividad onanista. Reitero, no son los cadáveres los que me atraen, son los olores que desprenden.
Jaja y ahora lucy? Lo tomas para el laburo
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